¿Alguna vez os habéis preguntado cómo unir el sabor del boquerón y del limón sin que los boquerones fritos se queden mustios? La solución me llegó esperando mi turno en la pescadería del mercadona, y es que nada mejor que escuchar las recetas que de cuando en cuando regalan las clientas a las propias pescateras. Y ahí estaba yo, deseando comprar salmón cuando una muchacha muy salá nos dio esta receta:

medio kilo de boquerones
el zumo de un limón
aceite de oliva virgen
harina

limpiamos los boquerons de cabezas y tripas, los enjuagamos para retirar toda la sangre y dejamos macerar junto con el zumo de limón media hora. Pasado este tiempo escurrimos, introducimos en una bolsa con un poco da harina, le damos un buen meneo y escurrimos bien de harina. Freimos en abundante aceite de oliva virgen caliente (si el aceite está muy frio o muy caliente se nos estropeará el invento). Escurrimos en papel absorvente, añadimos sal al gusto (aconsejo la sal maldon) y servimos calentitos. Veréis qué sensación cuando notéis los boquerones crujientes con sabor a mar y limón. 😉